Ayer hice un viaje relámpago a la capital del imperio (el imperio americano, se entiende). Lo de relámpago no es por la duración del viaje, ocho horas en la peor primera clase del mundo, si no por la rápidez con la que lo planifiqué. Lo cierto es que me aburría en Madrid tras veinte días de inactividad y, aprovechando que mi father está viviendo aquí, decidí pasarme a ver si renovaba el fondo de armario. Lo cierto es que en un año he engordado seis kilos y ya no me cierra ningún traje.
No es la primera vez que vengo a Washington DC. Mi padre lleva tres años trabajando aquí y yo ya he vivido dos periodos de 6 meses así que me lo tengo ya muy trillado y sólo me voy a quedar dos semanas, lo suficiente como para echar de menos Madrid. En breve una mini-guía de viaje y fotos.
Me preocupaba que al llegar me recibiera algún representante de la embajada y me hiciese el lío para obligarme a sacar de marcha a las hijas de ZP, pero gracias a Snoopy las niñas-orco no fueron abandonadas aquí y han vuelto a Mordor España a seguir practicando la magia negra. Menos mal, porque yo lo más gótico que conozco es la Catedral de Nôtre-Dame.
Voy a explicar lo de la primera clase porque no quiero que los dos tres lectores que tengo me confundan con un pijo recalcitrante (aunque dos de ellos ya me conocen bastante bien y no se los puede engañar). En realidad yo pagué turista, pero ayer por la mañana tuve la suerte de vestirme cual beau brummel con una chaqueta (que si me cerraba) y presentarme con poco equipaje e indecemente tarde en el mostrador de facturación de un vuelo que iba hasta las trancas de pasajeros. Como me camelé un poco a la tipa y era más barato hacerme el upgrade que pagarme el overbooking pues me pasaron a la primera de US Airways, que es como la turista de Iberia. La comida era insípida y las películas eran malas (excepto Star Trek). Menos mal que había un puerto de energía y pude enchufar el Mac para verme entera la segunda temporada de LOST (que no ayuda mucho a sentirse seguro en un avión que sobrevuela el Atlántico). En semejantes circunstancias sólo el exiguo espacio extra era de agradecer.
El resultado es que he estado todo el día recuperándome del «síndrome-de-la-primera-clase-en-tiempos-de-crisis» y no he podido hacer mucho más allá de leer los 5000 feeds que tenía pendientes, empezar la tercera de LOST, crackear el wi-fi del vecino (por si el mío falla, en breve un screencast) y congratularme por la victoria de Rio de Janeiro para los Juegos Olímpicos de 2016.
¿Y por qué me congratulo? Transcribo literalmente lo que le he puesto en un e-mail a mi madre, que había ido a la Plaza de Oriente con toda la parafernalia marketiniana, «El capricho de Gallardón nos ha costado 8.000 millones de € más de deuda, que pagaremos entre todos los madrileños, y si nos hubiesen dado los juegos esta cantidad aumentaría cinco veces más. Sin contar el caos de obras, zanjas, gente, atascos, prostitutas del este de Europa y ladrones que se hubieran concentrado en Madrid hasta 2013. Gallardón debe dimitir. Por higiene. No lo siento NADA por él, que sea coherente con lo que dijo hace un mes y que asuma toda su responsabilidad en vez de meterse en otra aventura del tipo «Madrid 2020». Los JJ.OO. son bonitos cuando se ven por televisión a un mínimo de 500km de distancia -como los de Barcelona- pero cuando los tienes encima no te hace ni puta gracia lo del citius, alitus, fortius.»
Este no es un blog político (en realidad todavía no he decidido la temática), pero me parece que la ineptitud de Gallardón es un tema de suficiente relevancia como para que le dedique unas líneas. No en vano el Viernes pasado estuve varias horas defecándome en su felicidad a voz en grito mientras mi coche (NO) avanzaba por Serrano, antaño la calle más fluida de Madrid. Puede que si me animo empiece a comentar otros asuntos de importancia nacional como la crisis, la subida de impuestos, el Estatut catalán o la hija de Belén Esteban.
Así que esta noche saldré a ver si observo a la fauna femenina autóctona y mañana me iré de compras a aprovechar el cambio euro-dolar. Sólo me queda decir «Hola everyone!»
Pues lo siento tío pero ahí no estoy de acuerdo, creo que la publicidad a nivel mundial que dan unas olimpiadas no tiene precio.
Ser durante un mes el centro del mundo es algo que muy pocas ciudades pueden disfrutar, Madrid desde luego no necesita esa publicidad para ser conocida pero nunca viene mal.
Yo la verdad es que hasta esta mañana no me lo creía del todo, pero después de pasarme enganchado el día a la tele, y viendo el impresionante proyecto que teníamos (sin duda el mejor) me han ido ganando poco a poco.
Me siento muy madrileño (soy de esos que llaman gatos, abuelos nacidos en Madrid, pero la verdad es que desde el tatarabuelo de mi padre, Mariano José de Larra somos madrileños) y los vídeos me han emocionado que hasta alguna pequeña lágrima resbalaba por mi mejilla.
Me he ido creciendo minuto a minuto y al eliminar a Tokyo me imaginaba ganadores.. El chasco para mí (y para el 86% de la población) ha sido muy grande.
Creo que vivo en la mejor ciudad del mundo y por supuesto en el mejor país. No tienes más que irte un par de semanas para echar de menos a la gente, la comida, las risas de los españoles y esa alegría/pasión que nos caracteriza.
Por otro lado confío en el Alcalde y creo (espero, sobre todo) que las obras sean para mejorar la ciudad pero te doy la razón en que todo está patas arriba. ¡A ver si encuentra el tesoro!
SER ESPAÑOL ES UN ORGULLO…
MADRILEÑO, UN TÍTULO.
Charly, con las horas que son en Madrid no puedes pensar con claridad. Estoy de acuerdo en que teníamos, desde el punto de vista técnico, el proyecto más completo y que deberíamos haber ganado. Tampoco quiero que se malinterprete mi patriotismo, yo ya sabes que soy muy patriota y adoro Madrid, pero lo que no se puede es hipotecar la capital de España por un sueño vano. Estaba claro que NO iba a ser Madrid, más que nada por la rotación de continentes y porque nunca ha habido unos JJOO en América del Sur.
Este Alcalde que tenemos es un político como la copa de un pino, pero no coincido con él en prácticamente nada. Creo que se siente llamado por Dios para salvar a España de todos los que no son él, y que en su egocentrismo no se para ni un minuto a pensar en los inconvenientes de sus acciones. No se pueden, si no, explicar cosas como lo que ha hecho en Plaza de Castilla o lo que quiere hacer en la Plaza Mayor.
Sólo espero que no se meta en berenjenales de Madrid 2020, porque te apuesto YA una botella de Absolut a que se lo dan a Bombay o Calcuta, si no a Sudáfrica.
Coincido en el hecho de que los JJ.OO requieren una inversión colosal. Pero discrepo en que sea un despilfarro.
Pues bien gestionados son un polo de atracción turística como demostró Barcelona 92. Y si bien Madrid, evidentemente no es una desconocida, sí necesita un acontecimiento que muestre al mundo lo que hoy es.
2020 puede ser una lucha entre capitales europeas y, ahí, Madrid puede jugar la baza de que es la única gran capital europea que no ha organizado unos JJ.OO.
Con lo de las hijas de Zp aún no salgo de mi asombro, ¿de verdad creían que podían hacer lo mismo que en el verano de 2004?
No me perderé esa mini-guía y fotos, ni tampoco… el post sobre Belén Esteban! : )
Saludos.
P.S: Lo de Perdidos es verdadero masoquismo. : )
Los JJ.OO. son nocivos para la economía. Son como un excedente de tesorería que cuesta más de lo que vale.
Ahí tenemos el ejemplo de Barcelona ’92, que fue muy bonito, estuvo todo muy bien organizado y luego ¿qué?. El 93 fue un año recesionista para España, en el que la renta per cápita bajó un 17% y el PIB bajó hasta el -1% respecto al año anterior. Teniendo en cuenta que de el 92 al 93 el PIB subió un 0’9% nos encontramos con un resultado negativo del -0’1%. Puede parecer poco, pero calcula el 0’1% de quinientos setenta mil millones de dólares (un 5 con todos estos 00000000000 XD) y verás de lo que hablo.
2020? Si para entonces hemos salido de la crisis y nos hemos librado de ZP y de Rajoy puede que me anime.
Niego la mayor, lo que es nocivo para la economía son los JJ.OO mal gestionados (léase Montreal 76)
Pues lo contrario permite cubrir coste e incluso obtener superávit como en el caso de los Ángeles, Seúl, Atenas o Pekín.
Barcelona no sirve como pieza de contraste porque ese mismo año se organizó la Expo de Sevilla, y eso no hay economía que lo resista.
Salvo cataclismo, en 2020 España estará en condiciones de organizar los JJ. Quizás, el COI nos ha hecho el favor de nuestra vida.
Es verdad que en el 92 influyó la Expo (lo sabía y me lo he callado cual cerda), pero lo cierto es que en este momento Madrid está tan endeudada que no sé si soportaría la organización de unos juegos aunque posteriormente arrojen beneficios.
A eso me refería con lo del favor del COI. Para 2016 ninguna de las AA.PP están en condiciones de asumir ese gasto.
Saludos.
P.S: Si tuviera tu punto de vista, yo también lo hubiera omitido, XD.
La fauna femenina autoctona? Pues esta noche me toca a mi con la fauna masculina. A por un buen macho iberico!
Leticia, que poco sentido del humor. Tú siempre serás mi bollito de fresa y nata. Ains!
@Ysasmendi: Si es que hay que tener cuidado con lo que se postea 🙂
Al contrario. Postea lo que quieras y ten cuidado con A QUIÉN le das la dirección de tu blog…
@Ysasmendi: Cierto. Pero como esté suscrita a los comentarios… lo estás arreglando! 🙂